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Antes de realizar un tatuaje, información y reflexión
Cuando hacemos un tatuaje, sólo pensamos en posibles complicaciones o efectos secundarios como infecciones bacterianas, reacciones alérgicas o inflamaciones, que sólo afectan a un porcentaje mínimo de los tatuados. No llega al 5%. Pero muy pocas veces pensamos en la tinta, el pigmento, que nos inyectan en nuestra piel, el colorante que puede pasar a nuestro torrente sanguíneo y producir alergias, o problemas más graves en nuestra salud. Los pigmentos actuales, no tienen nada que ver con los usados hace décadas de años. Producen más alergias y muchos de ellos no son hipoalergénicos o se encuentran en mal estado. En la mayoría de los casos los procesos inflamatorios son debidos a colorante rojo y las mezclas que derivan de éste.
¿Qué opinan los dermatólogos y expertos en salud?
Los expertos opinan que el problema puede llegar en cualquier momento o pasados los años. El depósito intradérmico de la tinta es una exposición de por vida. Nos preocupamos por los pigmentos del tinte, de las sombras de ojos, del maquillaje, pero no de nuestros tatuajes, siento decirte que contienen colorantes potencialmente tóxicos y están peor regulados.
Según otros estudios, se ha observado que hasta el 20% de las muestras de tinta estaban contaminadas con bacterias, ya sea en el proceso de manufactura o por el uso de agua contaminada al realizar las disoluciones.
En la actualidad no hay una legislación específica europea sobre los tatuajes y los colorantes empleados. Según el doctor Ortiz (dermatólogo que está llevando a cabo una investigación sobre estos temas), un 80% de los tatuadores emplean tintas procedentes de EEUU o Inglaterra que no están homologadas en España. Este es el problema.
Razones para no realizar demasiados tatuajes
- Contienen pigmentos azoicos considerados pre-cancerígenos
- Cuantos más tatuajes se tenga, mayor será el número de partículas que se acumularán en los nódulos linfáticos.
- Contienen metales pesados como el níquel, el cromo, el manganeso o el cobalto.
- La mayoría derivan del petróleo.
- Pueden interferir con las técnicas de diagnóstico del cáncer
- Muchos colorantes son sustancias nuevas no utilizadas previamente en humanos. Colorantes industriales sin testar.
- Puede provocar quemaduras en caso de realizar resonancias magnéticas nucleares.
- En personas con tatuajes extensos es imposible controlar los lunares o manchas en la piel.
- Muchos anestesistas creen que no deberían realizarse tatuajes en la región bajo-lumbar donde se pone la epidural. Por el riesgo de introducir sustancias tóxicas en el sistema nervioso central.
Qué colores son los más peligrosos
Los tonos marrones, tonos tierra contienen óxido de hierro una sustancia considerada peligrosa a altas exposiciones por generar problemas respiratorios.
El tono rojo es el que produce mayor número de alergias, incluso años después de su realización.
El tono negro produce granulomas en los ganglios linfáticos. Pudiendo generar inflamación crónica del ganglio.
¿Y los tatuajes de henna, son peligrosos?
Los tatuajes de henna son una tradición árabe, que llegó hace años a occidente. Una moda que también conlleva algunos riesgos.
La henna se obtiene de las hojas de un arbusto llamado Lawsonia inermes. Tiene tonos rojizos y tierra. Si la henna es pura y no está adulterada con otras sustancias como las PPD parafenilendiamina , el proceso es seguro y no conllevaría riesgos de alergias. En caso contrario pueden generarse erupciones cutáneas, irritaciones o incluso dermatitis.
La henna negra no existe, para oscurecerla emplean colorantes y PPD para aumentar su duración, en la mayoría de los casos.
No emplear henna negra nunca en niños.
Aquí os dejo un vídeo sobre la henna adulterada y sus efectos secundarios.
Conclusión
A día de hoy no hay ninguna evidencia de que estos nuevos colorantes sintéticos sean cancerígenos, el tiempo lo dirá, como está ocurriendo con otras sustancias (amianto-sales de aluminio-parabenos)
Lo que sí es cierto es que los pigmentos negros provienen de hidrocarburos, que tienen componentes cancerígenos.
Como siempre, debemos ser precavidos a la hora de hacer un tatuaje. Elegir un buen profesional que empleé tintas homologadas en España, y sin colorantes que puedan producir alergias. Hacerlos en zonas alejadas de los ganglios linfáticos, y mantener las medidas de higiene y seguridad recomendadas.